El Museo pretende acercar al público el interesante valor patrimonial y taurino de la Plaza de Toros. Es uno de los edificios más emblemáticos del paisaje urbano de Valencia, ciudad española que alberga un edificio de primera categoría donde toro y torero se encuentran en la lidia por primera vez.
Diferentes enclaves de la ciudad hicieron las veces de coso taurino hasta la construcción de la plaza de toros en 1850 tal y como está hoy.
En 1850, renovada la Junta Administrativa del Hospital de la Diputación de Valencia, siendo Gobernador Civil Melchor Ordóñez, se construye un coso estable y resistente, de mampostería, con unas instalaciones adecuadas para el desarrollo de las celebraciones. Construida entre los años 1851 y 1859 según el proyecto del arquitecto valenciano Sebastián Monleón, la Plaza de Toros de Valencia es un edificio inspirado en la arquitectura civil romana.
Los primeros festejos ya se celebraron en 1851 con la actuación de José Redondo El Chiclanero como único espada, y la inauguración oficial del coso fue en junio de 1859, en la que toreó en solitario Francisco Arjona Cúchares.
Desde el mismo momento de su inauguración y ya en el siglo XIX es escenario de eventos relevantes como la despedida de Lagartijo o el de las tardes de gloria de Gallito (José Gómez Ortega Joselito) que contó en su cuadrilla con un subalterno como Blanquet.
En la plaza confluyen diferentes valores que la convierte en un recinto de interés cultural y turístico. Un espacio lleno de rincones, donde cada uno tiene su especial función.
Se observa una maqueta de la misma como es definitivamente tras la última reforma en el año 2010, los planos de los graderíos y tribunas y el gran cartel Toros de Muerte con el que se inauguró el coso el 20 de junio de 1859.
La sala cuenta con un interactivo donde el visitante podrá aprender jugando con las distintas prendas que componen la indumentaria del torero y el picador.